Hablemos de Edadismo
Tuve la fortuna de ser invitado por Jorge Ramos* para opinar al respecto en AL PUNTO de UNIVISION en días pasados. Aquí hago un resumen de los temas hablados y toco otros aspectos que por razones del escaso tiempo en televisión no alcanzaron a quedar en la entrevista.
Ante la pregunta central de la entrevista y que es el título de este blog, la respuesta es sí. El Edadismo es una discriminación generalizada, en este caso por la edad y se constituye en el primer error al juzgar a Biden y a Trump como viejos. No hay que discriminar a nadie por su edad. Ni a los jóvenes por ser muy jóvenes ni a los mayores por ser muy mayores. Precisamente el presidente Reagan de 73 años en 1984 hace con mucho humor una invitación a no discriminar a su joven oponente Walter Mondale de 49 por su inexperiencia.
En el caso de la presidencia de Estados Unidos más que discriminar al señor Biden por sus 81 años o al señor Trump por sus 77, lo que hay que entender es si sus actuales capacidades son las mejores para un cargo global, de máxima dimensión que impacta a todo el planeta como una gran potencial mundial que son los Estados Unidos.
Es un cargo que necesita mucha experiencia a todo nivel y la experiencia viene indiscutiblemente unida a los años, a los errores y a la superación de los mismos. Si fuera por edad, ambos suman mucha experiencia, aún están vitales y activos y eso es positivo. Pero por sus últimas actuaciones ninguno de los dos está realmente preparado para ejercer el cargo. El señor Biden, más que problemas con la memoria puede estar teniendo errores de análisis de apreciación, de ejecución más importantes que puede tener cualquier persona de 80 años, pero que por su responsabilidad global sí se vuelven muy delicados y de seguro su equipo ayuda a que no sean mayores.
El señor Trump también ha tenido problemas de olvidos y confusiones. Confundió hace pocos días a su opositora a la candidatura a la republicana Nikki Haley, con Nancy Pelosi senadora demócrata y Presidente del Congreso. Pero lo más importante es lo que está prometiendo que haría en su segundo gobierno. Ya está poniendo nerviosos a sus aliados de la Unión Europea (EU) o los miembros de la OTAN. Eso sin mencionar que tiene cuatro juicios legales en su contra que seguro no se olvidan fácil mientras se gobierna. Acaba de perder su licencia para hacer operaciones financieras por dos años en Nueva York con una multa de US$ 335 millones de dólares por fraude empresarial y días antes perdió el juicio civil por difamación que ante la escritora E. Jean Carroll que recibirá US $83 millones de Trump. Aunque también habría que evaluar los méritos que estén teniendo en sus labores.
Es claro que ambos están fallando, no en la edad sino en cómo hacen su trabajo o en su capacidad para hacerlo relacionado con la dimensión del cargo, uno de los más importantes del mundo. Si estuvieran en sus casas viviendo sus vidas el juicio o la importancia seria otra. Está bien que sean personas mayores activas, pero tienen que ser congruentes para la responsabilidad que tienen y ambos muestran que ya no lo son.
EL CONTRASTE DEL PAPA FRANCISCO
En contraste veamos un ejemplo de capacidad innegable de una persona mayor. El Papa Francisco que hoy tiene 87 años es mayor que ambos, tiene más edad que la que alcanzaría Biden al final de su segundo periodo, si es reelegido. El Papa tiene limitaciones físicas, ha tenido un par de operaciones importantes, usa periódicamente silla de ruedas, atraviesa el mundo llevando la fe católica y nadie le está pidiendo que renuncie al cargo por incapacidad o porque lo esté haciendo mal. Así, la conclusión es que tenemos que evaluar a las personas y más en estos cargos tan altos por sus capacidades, habilidades y desempeño, no por su edad. Y eso aplica a los jóvenes y a los mayores, a las empresas, a las familias y en general a toda nuestra sociedad. Es cuestión de capacidad y logros, no de edad.
Eso es también la Nueva Longevidad. No limitarnos ni que nos limiten. Que más allá de la edad de jubilación, como persona mayor seas capaz, disfrutes y seas aportante haciendo lo que haces. Realizarte con tu proyecto. Grande o pequeño pero satisfactorio. Si no funciona, incluso puedes buscar otro proyecto que cuadre mejor con tus actuales capacidades habilidades y deseos. Es vivir plenamente a cualquier edad, especialmente si se está de los 50 años en adelante.
Click aquí para ver la entrevista https://www.youtube.com/watch?v=3NnJ56SMJkM
¿DÓNDE ESTÁ EL RECAMBIO?
Volviendo a las elecciones en Estados Unidos que serán el próximo 5 de noviembre, si ninguno de los dos debiera ser presidente de los Estados Unidos, ¿quién hace el recambio? Veamos. Es importante entender que el recambio tampoco se haría con gente muy joven. Las dos posibles candidatas a sucederlos serían Kamala Harris, 59 años, a Biden y Nikki Haily de 52, Republicana. Son personas que en pocos años van a entrar a la tercera edad y además con experiencia que es lo que se necesita. Ambas han ocupado cargos en sus estados, en el senado y en la política internacional sumando la repetida palabra: experiencia. Esto es además muy lógico porque el sistema político de los Estados Unidos que solo tiene dos partidos que son el Republicano que es un partido conservador y el Demócrata que es un partido de centro, apenas un poco más liberal, mantienen esa estructura conservadora que va más unida a un pensamiento adulto mayor y experto. El promedio de edad de los senadores estadounidenses es de 61 años. Otros jóvenes con experiencia.
¿Qué haría que cualquiera de ellas fuera elegida?
Lo que las hace únicas y diferentes para aportarle a la política de Estados Unidos y del mundo. Experiencia y que han quebrado paradigmas y barreras para las mujeres llegando muy lejos. El apoyo de su partido No por su edad.
Hablando de edad, no son precisamente unas niñas. Tienen ambas dos hijos mayores de 20 años, siendo los de Kamala realmente sus hijastros (ella no tuvo hijos bilógicos) lo que muestra que si llegarán a la presidencia podría ser presidentas-abuelas en ejercicio.
EDADES Y CAPACIDADES EN LATINOAMERICA
Veamos hacia el sur donde pasan cosas diferentes. En otros países de nuestra región latinoamericana también hay mandatarios mayores como en México López Obrador de 70, en Brasil Lula de 78, (anterior gobierno de 57) y en Colombia Petro de 63 o en Argentina Milei de 53. También llegan algunos más jóvenes (podrían ser hijos de Biden y Trump), pero también les cuesta mucho el factor de experiencia. Algunos de ellos no han tenido un cargo ejecutivo de gobierno sino solo han vivido desde la barrera del Senado y no han administrado la arena pública del ejecutivo. En El Salvador Bukele y en Chile Boric, ambos de 42 y ahora se suma en Ecuador Noboa de 36. Acá en laregión si hay más recambio porque hay más partidos y la izquierda ha logrado conquistar terreno. Pero hay que entender que la experiencia, más allá de la edad se gana acumulando la práctica de gobernar y parándose de las caídas. En eso Biden y Trump son innegables maestros.
Una de las claves para administrar, gobernar y avanzar en los tiempos modernos es la intergeneracionalidad. Es decir, lograr un trabajo armónico entre las generaciones jóvenes y las mayores donde se unan la innovación y la educación actualizada de los primeros con la experiencia y visión aplomada de los mayores.
Rematemos diciendo que la edad ya no es un simple número; ahora es un indicador de experiencias, aprendizajes y oportunidades. Clasificar o etiquetar por edades es cada día más difícil por la diversidad y nos desafía a repensar nuestras percepciones y expectativas sobre el envejecimiento.
Que la discriminación por edad o Edadismo desaparezca depende de todos nosotros. El debate de si Biden y Trump son viejos es una oportunidad para ver las cosas sin la etiqueta de la edad.
Es debate nos hacer pensar entre otras cosas, que les quiero dejar para su análisis:
¿Hay edadismo en su entorno?
¿Hay edadismo en su familia o en su trabajo?
¿Qué rol asumen hoy frente al edadismo y la contratación de personas 50 y 60+ las firmas de cazatalentos (head hunters) ?
¿Qué puedo hacer yo para evitar el edadismo?
FERNANDO ROCA CORREA
#Edadismo
#Nueva Longevidad
#Intergeneracionalidad
*La revista Newsweek incluyó a Jorge Ramos en la lista de los 50 políticos y periodistas más importantes de Estados Unidos; por otra parte, la revista Time lo considera uno de los 25 hispanos más influyentes de Estados Unidos y la revista People en Español lo incluyó en la lista de los 100 latinos de mayor influencia en el mismo país. Ganador de los premios de periodismo María Moors Cabot y Emmy entre otros.